mi
n este 2021 pasaron diferentes acontecimientos que afectaron en la región: elecciones, afectaciones por el cambio climático, y hasta la aparición de nuevas variantes de la covid-19. La corrupción, los paraísos fiscales y la trata de personas también han dando de que hablar en América Latina y desde CONNECTAS respondimos con información y análisis ante esos sucesos. Aquí les compartimos las investigaciones que más llamaron la atención de ustedes, nuestra audiencia, en el transcurso del año:
Pandora Papers es una nueva investigación periodística a nivel mundial que revelan secretos financieros guardados durante años por políticos, artistas, empresarios o deportistas en jurisdicciones con beneficios fiscales, algunas conocidas como paraísos fiscales. Este trabajo podría ser en un referente periodístico que nos dejó este 2021.
El programa bandera del gobierno de Andrés Manuel López Obrador para generar empleo en el campo y luchar contra la deforestación tiene un impulso particular en su natal estado de Tabasco. Allí el cacao ha adquirido preponderancia gracias a Hugo Chávez Ayala, amigo de la familia presidencial, empresario que se beneficiaría con los productos que se cosechen en el plan gubernamental.
Una investigación de Vorágine y CONNECTAS que revela por primera vez los nombres de los curas denunciados por pederastia y abuso sexual en la jurisdicción de la Arquidiócesis de Medellín, casi la mitad continúa en ejercicio en parroquias de Colombia y solo tres han sido condenados por la justicia ordinaria.
El director de ATB, una red televisiva boliviana, dijo que la empresa extraterritorial fue abierta por su padre con el fin de gestionar la herencia familiar y que no se hizo nada ilegal.
Pierden la libertad apenas pisan cualquier playa trinitense y su “pecado original” es una supuesta deuda que estas mujeres solo pueden pagar convirtiéndose en una mercancía sexual. Las amansan con un proceso previo de tortura, rotación y terror hasta que pierden el impulso de escapar. El crecimiento de estas redes de trata es tan evidente que informes regionales y parlamentarios reconocen que en esa maquinaria de engaño y violencia, la complicidad del aparato de justicia de la isla multiplica el número de víctimas.
No es un Ejército, pero sus funcionarios se forman en escuelas militares de América Latina y Estados Unidos. No es una empresa de seguridad privada, pero sus oficiales prestan servicios de vigilancia a particulares, utilizan el equipamiento del Estado y reciben pagos adicionales. No es una agencia de inteligencia, pero algunos de sus miembros han sido usados para el espionaje. No es la institución más eficiente del gobierno, pues los homicidios están en aumento, pero es uno de los cuerpos de seguridad mejor pagados del continente: es la Policía Nacional de Panamá.
Cada día, unos 35,000 obreros levantan los cimientos de la infraestructura turística en …